Anteriormente las alternativas para el acondicionamiento acústico de un recinto eran reducidas y no permitían variantes en cuanto a la estética. Era habitual la instalación de placas modulares en los techos con materiales que no guardaban sintonía con la estética del local.

Actualmente se ha evolucionado y se están desarrollando paneles con diferentes formatos y diseños que facilitan la adaptación estética, e incluso mejoran sus características fonoabsorventes. Cumpliendo su principal función, la de evitar ruidos externos y mejorar la acústica para que el sonido llegue con la misma calidad a todas las personas que estén presentes en espacio tratado.